Son diversos y variables las situaciones que se presentan como complejas o de dolor, la terapia facilita un espacio de contención y encuentro para observar y comprender nuestras emociones y relaciones; así como las perspectivas que pueden estar interfiriendo significativamente en el buen funcionamiento en nuestra cotidianeidad, el modo en que nos vemos a nosotros mismos y a los demás y el significado que otorgamos a nuestras vivencias. Este es un elemento esencial para posibilitar cambios tanto externos como internos.
Algunos de los problemas que podemos encontrarnos a lo largo de nuestra vida y que es posible mejorar y superar con éxito gracias a la terapia son:
- Crisis Existenciales
- Separación
- Duelo por la pérdida de un ser amado
- Pérdida del trabajo
- Pérdida de la salud
- Pérdida de seguridad en sí mismo
- Problemas con la pareja, familia e hijos
- Traumas no superados
- Problemas laborales
- Transtorno de Ansiedad
- Violencia de Genero
- Angustia o Depresión
- Inseguridad Emocional
- Personalidad
- Habilidades Sociales
- Obsesiones
- Control de Estrés
- Control de Ira
- Fobias
- Insomnio
- Adicciones